Quién no se sabe un cuento del travieso
“Jaimito”, o quién no ha dudado de la capacidad intelectual de los “Gallegos y
Gochos”, sin olvidar el típico “Borracho Impertinente”, solemos escuchar
anécdotas de la infancia o relatos propios de la familia. El resultado, un
lenguaje universal… La Risa.
En la actualidad hay quienes asocian el estar
sano con la imagen de una persona con “chocolaticos” producto de horas
incontables de ejercicios aeróbicos e interminables regímenes alimentarios, en
resumen, un largo camino con muchos sacrificios. Pero estar saludable puede ser
tan sencillo como realizar una acción corporal que denota felicidad.
No hay una concordancia en la cantidad de
músculos que se ejercitan mientras una persona se ríe, la cifra varía entre 14 y 18 músculos
faciales, lo que sí es cierto y así lo asevera la psicóloga Ana Sierra, en una
investigación realizada por la Universidad Jaume I de la ciudad de Castellón –
España que cita: “Reírse cinco minutos seguidos equivale a hacer 45 minutos de
ejercicio físico”.
Alrededor de 400 músculos en todo el cuerpo
se excitan con una carcajada y se incluyen algunos del estómago que sólo
sabemos que existen al momento de reírnos. ¿Cuántos
hemos reído hasta que nos duele e incluso llorado de risa? La carcajada nos permite lubricar y limpiar
los ojos con cada lágrima, con el vibrar
de la cabeza despejamos la nariz y el oído. Además, facilita la digestión,
elimina el insomnio y previene el infarto.
Cuando escuchamos ese peculiar “ja ja
ja” nuestro cerebro activa ciertos
circuitos neuronales que se relacionan precisamente a la risa y que además hace
que se incremente la misma, así lo determinó Robert Provine, psicólogo y
profesor de la Universidad de Maryland en Baltimore, Estados Unidos, en uno de
sus estudios sobre los diferentes efectos
de la risa en los seres humanos.
Se han desarrollado
teorías sobre el poder de curación de la risa. Beneficios
fisiológicos como el alivio del dolor, mejora del control de la glicemia en
pacientes diabéticos, estimulación del sistema inmunitario y endocrino.
Detallado en un trabajo de investigación realizado por la Red Española de
Investigación de la Risa (Reir).
La risa ayuda al sistema inmunológico y a la
estimulación en la producción de beta-endorfinas que genera un efecto
analgésico en el cuerpo. Apoyándose en esta premisa, en el mundo existe un grupo de personas, vestidos con llamativos
colores, narices rojas, burbujas y globos, que demuestran a través del juego el
poder sanador de sonreír.
Inspirados por Patch Adams, muchos de estos
personajes trasladaron su mágico mundo a un lugar que lo necesitaba con
añoranza. Quien más para hablar sobre el efecto sanador de la risa que el
voluntariado denominado Payasos de Hospital. Venezuela desde hace más de 9 años
cuenta con la fundación Doctor Yaso
quienes aplican este método y nos contagian con su alegría.
No cabe duda, debemos procurar que una Sonrisa se convierta en nuestra
medicina, como reza el lema de los yasos. Sin embargo Víctor Hugo nos recuerda
que "La risa es el sol que
ahuyenta el invierno del rostro humano".
Es sencillo Sonríe.
@Rodolfo_Carreno
@Rodolfo_Carreno